Los nuevos retos del
LIDERAZGO
Un buen médico puede ayudar a un paciente con graves problemas cardíacos:
practicarle una operación quirúrgica y someterlo a un tratamiento con medi-
camentos. Pero si esa persona no deja de fumar, no mejora su alimentación,
no hace gimnasia, y no encuentra tiempo para el relax y el descanso, de
nada servirá. El médico tiene la obligación de movilizar a su paciente a que
encare cambios en sus hábitos de vida: sin embargo, la tarea de hacer
esos cambios, a fin de adecuarse a su condición de cardíaco que quiere
vivir muchos años, es del paciente.
Para Ronald Heifetz, de la Universidad de Harvard, el liderazgo es una activi-
dad que ejerce una persona en determinado momento. El líder no lo es por
su personalidad, el puesto que ocupa, o sus conocimientos, sino porque logra
movilizar a una persona o grupo a enfrentar sus desafíos más difíciles y que
aprendan de ellos.
A diario, las personas en nuestras actividades encontramos desafíos, ya sea en
las organizaciones y equipos en los que trabajamos, en las conversaciones con
colegas y clientes. ¿A qué llamamos desafío? Es una brecha entre una realidad actual,
y una aspiración futura. Y ya sea que actuemos o no, el desafío capta gran parte de
nuestra atención. Es necesario, dice Heifetz, distinguir dos tipos de desafíos: técnicos y
adaptativos.
En nuestro trabajo cotidiano estamos acostumbrados a enfrentarnos a desafíos meramente
técnicos, aquellos para los que conocemos las respuestas. Esto significa que podemos cerrar la brecha
aplicando los conocimientos y metodologías y experiencias anteriores. Eso no significa que los desafíos
técnicos sean fáciles de resolver, ni que sean poco importantes. Simplemente, significa que se pueden resolver
dentro del marco de nuestra experiencia anterior. Sin embargo, cuando nos enfrentamos a un reto de adaptación, la brecha no se puede cerrar utilizando los conocimientos técnicos existentes, puesto que son retos...


